Apoyo al plan de contención para los afectados por la Xylella

Primero fue Mallorca y posteriormente Alicante, donde ASAJA acaba de llevar a cabo una ronda de reuniones informativas sobre la Xylella entre varias localidades afectadas, como Guadales, Muro de Alcoy y Benifato. Estos eventos han tenido una asistencia masiva, congregando a más de 400 agricultores, alcaldes y ciudadanos, todos ellos afectados por la Xylella de alguna forma. ASAJA ha querido informar ante la preocupación de estos ciudadanos desde que se declaró el primer foco de la bateria en la comarca y comenzaran a exterminarse los arboles indiscriminadamente. Además han querido recoger la opinión del sector y los agricultores de a pie, que apoyan el plan de contención de cualquier manera antes que otras medidas más extremas.

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Según opinan los vecinos de Alicante: “ES UNA AUTÉNTICA VERGÜENZA QUE CONSELLERIA AUN NO HAYA APROBADO Y COMUNICADO LAS INDEMNIZACIONES POR LOS ARRANQUES”. Es por ello que ASAJA consideraba primordial realizar una labor informativa, con apoyo técnico y jurídico a los afectados. “ante el desamparo, la desprotección y la desinformación que, desde que se detectara el primer foco en Guadalest, han sufrido estas personas, que han visto cómo Conselleria llevaba a cabo, a través de la empresa TRACSA, arranques y fumigaciones de sus almendros que, en muchos casos, son su medio de vida, sin que el agricultor tuviera la notificación oficial en sus manos y una información clara de la situación y la indemnización por los daños”.

Según denuncia el presidente de Jóvenes Agricultores ASAJA Alicante, Eladio Aniorte: “Es una auténtica vergüenza que Conselleria aún no haya aprobado y comunicado las indemnizaciones por los arranques a los afectados. Estamos totalmente en contra de que, después de tres meses desde que se detectó el primer foco, no tengan las indemnizaciones claras y se sigan estudiando por los técnicos. Es muy urgente que se aclare cuál va a ser la compensación económica y se ofrezca una alternativa positiva al agricultor, el cual se siente totalmente abandonado y desprotegido. Desde ASAJA consideramos que no sólo se ha de pagar el árbol arrancado, sino también el lucro cesante por los cinco años que tiene que estar la parcela sin cultivar y los otros siete que tarda un nuevo árbol en producir fruto”.